Día Mundial contra el Trabajo Infantil: 12 de junio
- En un informe realizado por World Vision se observa un aumento significativo del trabajo infantil; la organización pide esfuerzos internacionales para detener este incremento.
- El 8 por ciento de las familias encuestadas por la ONG, en seis países asiáticos, declararon que la pandemia les ha obligado a enviar a sus hijos a trabajar y el 4 por ciento afirmó que ahora hacen mendigar a sus hijos.
- World Vision teme que, en Latinoamérica, donde más de 10 millones de niños y niñas trabajan y donde prevalece el empleo informal, aumente el trabajo infantil en ventas callejeras y la mendicidad.
Madrid, 11 de junio de 2020 – La situación de vulnerabilidad de muchas familias en todo el mundo, agravada por la caída de las economías que ocasiona la pandemia del COVID-19, aumentará las filas del trabajo infantil, advierte la organización humanitaria World Vision, en el marco del Día Mundial contra el Trabajo Infantil que se conmemora el 12 de junio. La organización pide esfuerzos internacionales para detener este aumento.
En un informe realizado por World Vision se observa un incremento significativo del trabajo infantil, tomando como muestra las entrevistas a familias de seis países asiáticos. De las familias encuestadas, 830 declararon que las medidas contra la COVID-19 les han obligado a enviar a sus hijos a trabajar. Esto representa el 8 por ciento de las familias encuestadas. Otras 415, el 4 por ciento de los encuestados, declararon que ahora hacen mendigar a sus hijos para salir adelante.
Los motivos expuestos hacían alusión a que sus ingresos disminuyeron o desaparecieron como consecuencias de las medidas de prevención frente al coronavirus. Además, el cierre de escuelas ha llevado a la eliminación de las comidas escolares. Esto ha hecho aumentar considerablemente la presión sobre la situación nutricional de los menores.
“Estamos viendo esta tendencia en otras partes del mundo, como en África y América Latina. Las consecuencias son extremadamente graves ya que a los niños se les roba su futuro. Muchos de ellos no volverán a la escuela y perderán la oportunidad de una vida mejor. En lugar de asistir a las escuelas, estos niños se esclavizan como trabajadores en la agricultura, en los vertederos de basura, donde buscan materiales reciclables, o en fábricas y canteras”, afirma Javier Ruiz, CEO de World Vision España.
En muchos países de África, América Latina y Asia, los cierres de los trabajos han hecho que los adultos pierdan sus empleos y, por lo tanto, ya no tengan ningún ingreso. Los sectores de la población más débiles desde el punto de vista financiero se ven particularmente afectados ya que tienen pocas o ninguna reserva financiera. Además, los precios están aumentando en muchos lugares, especialmente el de los alimentos.
En Latinoamérica más de 10 millones de niños y niñas trabajan. World Vision teme que en aquellos contextos donde prevalece el empleo informal, aumenten los niños y las niñas vinculados en ventas callejeras, e incluso aquellos forzados en esquemas de esclavitud como la mendicidad. “En años anteriores, tuvimos avances que lograron reducir el trabajo infantil. Pero el deterioro social y económico que anticipa esta crisis estimulará a muchísimas familias a sacar a sus hijos de la escuela ante la incapacidad de pagar sus estudios y proveerles alimento. Por otro lado, muchos sectores buscarán en los niños, niñas y adolescentes mano de obra barata para reducir sus costos operativos”, advirtió Joao Diniz, Líder Regional de World Vision Latinoamérica y el Caribe. “Debemos prevenir esta situación antes de que condenemos a la pobreza a toda una generación afectada por esta crisis”.