Según los datos de la última Encuesta de Condiciones de Vida (ECV) 2023, la carencia material severa para los niños, niñas y adolescentes en 2022 fue del 10,1 %, el dato más alto desde 2008. “La última Encuesta de Condiciones de Vida muestra que la carencia material severa se ha disparado en la infancia. En España, 1 de cada de 10 niños y niñas están en esta situación, niveles que casi duplican los de 2008” ha explicado Ricardo Ibarra, director de la Plataforma de Infancia, en la presentación del informe «Análisis de la Encuesta de Condiciones de Vida con Enfoque de Infancia 2023».
En 2022, año que analiza la encuesta, el 34,6 % de los niños, niñas y adolescentes no pudieron salir de vacaciones, el 16,1 % sufría las consecuencias de la pobreza energética, el 7,4 % sufría la brecha digital y el 5,9 % no comía proteínas de origen animal al menos cada dos días, indicadores que determinan carencia material severa. “Vivir en un hogar que no puede mantener una temperatura adecuada, tanto en invierno como en verano, no poder comer suficientes proteínas, no tener acceso a un ordenador o tablet o no poder irse de vacaciones afectan al pleno desarrollo de los niños, niñas y adolescentes” ha añadido Ricardo Ibarra.
Según muestra la Encuesta de Condiciones de Vida, en 2022, más de la mitad de niños niñas y adolescentes, el 52,1 %, vivían en hogares con dificultades para llegar a fin de mes; el 25,6 % en hogares con dificultad o mucha dificultad y el 26,5% con cierta dificultad. El grupo más desfavorecido es el de los adolescentes de 13 a 18 años, ya que el 34,9 % (tasa AROPE) están en riesgo de pobreza y exclusión social, el 31,4% de los niños y niñas entre 4 y 12 años y el 29,9 % de niños y niñas entre 0 y 3 años están también en riesgo de pobreza y exclusión social.
España es el tercer país de la Unión Europea con más tasa AROPE entre los niños, niñas y adolescentes menores de 18 años, sólo superado por Bulgaria y Rumanía. 2,6 millones de niños, niñas y adolescentes, el 32,2 % de la población infantil en España está en riesgo de pobreza y exclusión social. “Tener hijos supone un gasto medio de 672€ para las familias. Un gasto que, según se acercan a la adolescencia, se incrementa” ha explicado Ibarra “Es fundamental apoyar a las familias con hijos e hijas adolescentes. En esta etapa existe el riesgo de abandono escolar temprano, lo cual determina sus posibilidades de inserción laboral en el futuro y perpetúa la transmisión intergeneracional de la pobreza”.
Los datos muestran que la infancia más vulnerable proviene de familias con menor nivel formativo. En el año 2022, 8 de cada 10 niños, niñas y adolescentes con padres y madres solo con estudios primarios estaban en riesgo de pobreza y/o exclusión social. En esta misma situación se encontraban cerca de la mitad de los niños, niñas y adolescentes con padres y madres con estudios secundarios. Otros factores que influyen directamente en el riesgo de pobreza infantil son el origen de los progenitores, tener un solo progenitor o formar parte de una familia numerosa.
Según datos de Eurostat, España es el país de la Unión Europea con la mayor tasa de pobreza entre los niños, niñas y adolescentes cuyos padres o madres tienen origen extranjero (en especial extracomunitario). Según la Encuesta de Condiciones de Vida 7 de cada 10 menores de 18 años con progenitores de origen extranjero están en riesgo de pobreza y/o exclusión social en 2022. Además, el 49,1% de las familias monoparentales, el 45,9% de los hogares con tres menores de 18 años y el 65,2% de los hogares con más de tres menores de edad están en riesgo de pobreza y exclusión social.
“Nuestro país invierte poco y es poco eficiente en la lucha contra la pobreza infantil” explica Ibarra “España solo invierte el 1,6 % del PIB cuando la media europea se sitúa en el 2,5 %. Además, en 2022 las transferencias sociales sólo alcanzaron al 8 % de los niños, niñas y adolescentes y sólo lograron reducir la tasa de pobreza en 7,5 puntos, cuando le media europea está alrededor de los 16 puntos”.
Existe una relación directa entre las ayudas a la crianza y los niveles de pobreza infantil, por lo que la Plataforma de Infancia propone crear una ayuda a la crianza de carácter universal a través de deducciones fiscales reembolsables en el IRPF. También propone apoyos específicos a las familias monoparentales proporcionando un marco protector desde el primer hijo que se equipare al que disfrutan las familias numerosas.
Otras propuestas de la Plataforma de Infancia enviadas a los diferentes partidos políticos para que los tengan en cuenta en sus programas electorales son implementar cambios en acceso al Ingreso Mínimo Vital, garantizando que alcanza a los niños, niñas y adolescentes más vulnerables, cuyas familias actualmente no pueden acceder a él, o aumentar el gasto público en becas y ayudas al estudio desde el 0,19 % del PIB actual al 0,44 % del PIB en 2025.
“Es fundamental luchar contra la pobreza infantil en todas sus dimensiones, por lo que, además de las medidas económicas, son necesarias políticas específicas dirigidas a paliar la pobreza energética, la brecha digital, la garantía de una alimentación saludable, el acceso al ocio y al juego, etc.” ha añadido Ibarra.
Descargar ‘Análisis de la Encuesta de Condiciones de Vida con Enfoque de Infancia 2023’