En el marco de la conmemoración del Día de los Derechos Humanos
Malala Yousafzai, la joven pakistaní de 15 años de edad que en el mes de octubre fue víctima de un ataque perpetuado por los talibanes, se ha convertido en un símbolo de lucha por la defensa del derecho a la educación escolar para las mujeres.
La educación es un derecho humano fundamental, esencial para poder ejercitar todos los demás derechos, dado que promueve la libertad y la autonomía personal y genera importantes beneficios para el desarrollo. Sin embargo, millones de niños, niñas y personas adultas siguen privados de oportunidades educativas, en muchos casos a causa de la pobreza y exclusión social.
Ya en 2009, Malala Yousafzai se convirtió en una voz que cada vez se escuchaba más fuerte en foros activistas. Se convirtió en el rostro visible del pensamiento “progresista” en Swat, contando con la admiración y el reconocimiento de periodistas pakistaníes y extranjeros. En 2011, el gobierno de su país le otorgó el Premio Nacional de Paz, renombrado el Premio Nacional Malala de Paz para menores de 18 años. También recibió el Premio Infantil de Paz concedido por la Fundación The Kids Rights.
En el mundo hay 61 millones de niños y niñas que no tienen garantizado su derecho fundamental a la educación. Pero también hay niños y niñas que como Malala, luchan por el derecho a su educación en sistemas políticos donde los derechos son ignorados. Por esta razón, la Plataforma de Infancia quiere dedicar la conmemoración del Día de los Derechos Humanos a Malala Yousafzai, como símbolo de lucha por el derecho a la educación. Y en este sentido, queremos hacer una reflexión acerca de cómo está la situación de la educación en España.
Los últimos datos indican que la situación en España no pasa por uno de sus mejores momentos. Ya en la campaña de movilización ciudadana sobre educación de la Plataforma de Infancia: “Tu experiencia crea escuela”, alertábamos de los altos niveles de deserción y fracaso escolar, aumento del número de familias con todos sus miembros en paro que no pueden afrontar los costes derivados de la escuela, altas tasas de pobreza y exclusión social en nuestro país, así como medidas políticas como el recorte de 6.300 millones de euros en Educación que suman los proyectos presupuestarios para 2013 del Gobierno y las Comunidades Autónomas, si se comparan con las cuentas de 2010.
En 2013 los recortes anunciados en los Presupuestos Generales del Estado para el Ministerio de Educación alcanzan un 14%, es decir, de 2.270 a 1.944 millones de euros. Todas las partidas en Educación sufrirán ajustes salvo la destinada a enseñanzas especiales, que crecen un 15%, de 1,9 a 2,1 millones de euros, algo más de una milésima parte del presupuesto. La relativa a la educación compensatoria se reduce un 68,6%, de 169 a 53 millones; las partidas destinadas a formación permanente del profesorado recortan un 18,2%, en total 3,4 millones de euros; educación infantil y primaria se recorta un 4,4% y las enseñanzas universitarias, un 18,3%. Por otro lado, la dotación para enseñanzas artísticas se reduce un 27,2%; mientras que en deportes en edad escolar baja de 13 a 1,9 millones. La inversión en formación exterior cae un 7,8%, hasta los 100 millones de euros. Además se recorta en un 80 % en los gastos no financieros en I+D+i.
El panorama no es nada halagador dado que según datos de 2011, un millón de jóvenes en edad universitaria (entre 18 y 24 años) no terminaron estudios de bachillerato o formación profesional, es decir, un 26,5%, según datos del Ministerio de Educación. La cifra de abandono educativo temprano es de un 31,2%, el doble de la media europea y representa ese 31% de jóvenes que dejan de estudiar después de la enseñanza obligatoria, con o sin el título de ESO, y sin uno de Bachillerato o FP.
Ahora la Comisión Europea publica un estudio esta semana que revela que el 21,1% de los jóvenes españoles entre 15 y 29 años ni estudia ni tiene trabajo. Se trata de una de las tasas más altas de la Unión Europea y, además, cuantifica el coste económico de lo que esto significa: 15.700 millones de euros, el 1,47% del PIB.
En necesario e imprescindible hacer una reflexión sobre el derecho a la educación y los recortes que se están llevando a cabo en España. Voces como la de Malala Yousafzai se elevan en España desde diferentes ámbitos: rectores, docentes, padres y madres, alumnado y otros, defendiendo el derecho a una educación de calidad, equidad y libertad igual para todos y para todas.