“Cada día cojo mi cuenco y me voy a pedir comida a la calle. Lo hago todas las mañanas, a la hora de comer y por la tarde para cenar. La gente suele ser agradable y me da lo que puede. Mis padres viven en el norte y no les he visto desde que vine aquí”.
Issa* tiene 14 años. Sus padres le llevaron a la escuela coránica de Moustafa Fass Mbao en Dakar, en el 2005. Allí aprende de memoria el Corán junto con otros 60 menores. Sin embargo, a su edad no va a la escuela formal y no habla francés, el idioma oficial de Senegal.
Como Issa, son cientos de miles los niños y niñas que viven mendigando en las calles de Senegal y otras zonas del África occidental. Son conocidos como niños y niñas talibé. Aunque no se conoce la cifra exacta de cuántos niños y niñas viven en las escuelas coránicas en Senegal, las calles de Dakar están llenas de niños talibé.
Más información en la web de Plan España
La organización ENDA (Medioambiente y desarrollo del Tercer Mundo) que trabaja con PLAN en el país, calcula que tan sólo en Dakar viven más de 20.000 menores cuya tarea diaria es mendigar en las calles.
Se estima además, que entre un 30 y un 40 por ciento de los menores que viven en las daaras son niñas y que, mientras los niños piden comida en la calle, son ellas quienes se ocupan de las tareas domésticas.
PLAN, que trabaja en Senegal desde 1982, está llevando a cabo junto con USAID (Agencia de Desarrollo de Estados Unidos) un programa para introducir la educación formal en las escuelas coránicas de las ciudades de Louga y Dakar.