Madrid, 12 de diciembre de 2019. Este jueves, representantes de las 67 organizaciones de infancia que conforman la Plataforma de Infancia, junto a representantes de los partidos políticos han desplegado una pancarta con el lema «Por una Comisión de Infancia» ante el Congreso de los Diputados para pedir que se constituya una Comisión de Derechos de Infancia y Adolescencia durante esta legislatura.
“Esta Comisión garantizará que se escuche la voz de los niños, niñas y adolescentes en el Congreso de los Diputados y permitirá seguir avanzando en la toma de decisiones para mejorar la vida de la infancia y la adolescencia” explicó Carles López Picó, presidente de la Plataforma de Infancia.
En total, se han impulsado 27.739 iniciativas durante la pasada legislatura; 5.844 de ellas relacionadas con infancia, siendo este tema el más abordado en el Congreso. Por este motivo, según la Plataforma de Infancia, el Congreso debe convertirse en un espacio donde, además de dialogar con expertos y con la sociedad civil, se escuche la voz de la infancia.
Durante la pasada legislatura existió una comisión similar que se comprometió a realizar al menos una comparecencia anual con representación exclusiva de niños, niñas y adolescentes en el Congreso de los Diputados en sesión abierta y pública. Esta comparecencia tuvo lugar durante tres años y se verá interrumpida de no constituirse dicha Comisión. Se propuso, así mismo, establecer mecanismos de seguimiento y consulta parlamentaria sobre las propuestas presentadas por los niños y niñas así como sobre los temas que la propia comisión quisiera consultarles.
“Esta nueva legislatura es decisiva para la infancia y el Congreso de los Diputados debe ser el espacio de referencia para garantizar que se materialicen sus derechos, reconocidos en la Convención sobre los Derechos del Niño de Naciones Unidas” añade López Picó “Por ello, es fundamental contar con una Comisión de Infancia en el Congreso”.
La Plataforma de Infancia señala también que una Comisión específica de infancia es necesaria para ejercer el debido control parlamentario del Gobierno en materia de infancia, especialmente de organismos como el Alto Comisionado de lucha contra la pobreza infantil que carece de vinculación ministerial, al depender de Presidencia, y que, por tanto, no tendría comisión de referencia para dicho control.